Recomendaciones para tratar una infección urinaria

La infección urinaria se produce en cualquier parte del aparato urinario: los riñones, los uréteres, la vejiga y la uretra. La mayoría de las infecciones ocurren en las vías urinarias inferiores (la vejiga y la uretra). Estos males usualmente son producidos por bacterias, aunque también pueden presentarse a causa de virus, hongos o parásitos.

Las infecciones urinarias suelen presentar los siguientes síntomas: necesidad constante de orinar, sensación de ardor al orinar, orina de aspecto turbio, orina con olor fuerte, orina de color rojo, rosa brillante o amarronado, y dolor pélvico alrededor de la zona del hueso púbico. 

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Para prevenir las infecciones urinarias, debes seguir una dieta equilibrada y llevar un estilo de vida saludable. También es recomendable no retener la orina y beber abundante agua, al menos dos litros diarios. Otros consejos específicos son: orinar después de tener relaciones sexuales, cambiarse la ropa interior de manera frecuente, utilizar ropa con tejidos naturales, corregir el estreñimiento y, en el caso de bebés, cambiar los pañales frecuentemente. 

Si estás sufriendo una infección urinaria y necesitas un tratamiento, te damos algunas recomendaciones. En primer lugar, el tratamiento para combatir estas infecciones incluye antibióticos o antivirales. Para administrar eficazmente uno y otro tipo de fármaco, el médico especialista tiene la posibilidad de realizar una prueba de sensibilidad o antibiograma. Los antibióticos más usados son el trimetoprima, la amoxicilina y la ampicilina. 

Eso sí, antes de iniciar el tratamiento con antibióticos, el médico debe determinar si el paciente padece algún trastorno que pueda agravar la infección.

Los médicos aseguran que beber grandes cantidades de agua ayuda a limpiar el tracto urinario de bacterias. Asimismo, es mejor dejar de fumar y de tomar café y alcohol mientras la infección se mantenga.